El 25 de agosto, el colectivo Iniciativa por Palestina realizó un mural en homenaje al pueblo palestino. Una actividad en la que participaron unas pocas decenas de personas, que colaboraron con el artista Mounir Elkhale en la materialización de la actividad.
El mural, realizado en un muro que hace esquina entre la calle Marqués de la Cadena y la avenida San Juan de la Peña, refleja y denuncia la situación de opresión colonial que sufre Palestina.
La actividad se realizó con la autorización de la empresa propietaria del muro. Durante la actividad, se colocaron banderas para tomar fotografías, una en el muro y otra en un árbol cercano. Y también se puso algo de música con un pequeño altavoz con batería para animar a las personas participantes.
Sin embargo, la actividad asistió a una intervención de la Policía Local (con intervinientes de uniforme y de paisano) que ordenó al colectivo retirar las banderas y obligaron a quitar la música, que no podía molestar a nadie, ni por la potencia del equipo, ni por la distancia considerable de cualquier edificio residencial. Uno de los agentes intervinientes mostró una actitud gratuitamente autoritaria, que algunas de las personas asistentes tildaron de racista.
Durante la semana siguiente, con sorpresa, el colectivo tuvo conocimiento de que el mural había sido vandalizado. Mediante el uso de espray blanco se procedieron a emborronar todos los símbolos que hacían referencia a Palestina o a la resistencia del pueblo palestino. Un borrado selectivo y político, suponemos que de alguien que justifica la barbarie sionista y el genocidio en Gaza que ya se ha cobrado la vida de más de 40.000 personas.
Iniciativa por Palestina contaba con una autorización válida del 19 al 31 de agosto. A pesar de esto, al corregir las pintadas vandálicas, el 31 de agosto, el mismo agente de la Policía Local que mostró una actitud agresiva hacia la actividad y sus participantes, se presentó de nuevo en el lugar. Aunque el colectivo le mostró la autorización, exigió una adicional del Ayuntamiento, algo carente de sentido ya que el muro es de propiedad privada. Pese a ello la propuesta de sanción, realizada contra el artista, es por «realizar dibujos sin autorización» y la policía, además, confiscó el material (pintura, botes de aerosol, brochas, pinceles…).
El colectivo solidario con Palestina denuncia la parcialidad del Ayuntamiento y su obstinación en entorpecer la realización de esta actividad artística mediante la constante intervención de la Policía Local. El único objetivo de la misma fue rendir homenaje pacíficamente al pueblo palestino.
